El lactar estimula la hormona oxitocina que ayuda a contraer el útero hasta devolverlo a casi su tamaño original, reduce tus riesgos de padecer de cáncer de mama, resulta más económico que invertir dinero en fórmulas y los bebés tienden a ser más saludables y enfermarse menos.
La primera lactada no producirá leche. Como lo más que necesita el bebé en esta etapa son defensas y anticuerpos que lo inmunicen, tu pecho le proveerá una sustancia llamada calostro hasta que llegue la leche materna.
El calostro prepara el tracto digestivo del bebé, para que responda mejor a la leche que pronto recibirá. Muchas madres primerizas le temen a la posibilidad de sentir dolor en el área del pezón, y en esta etapa, los momentos de lactar serán breves pero frecuentes.
Sin embargo, si el bebé está bien posicionado y mantiene la boca bien abierta, probablemente sentirás molestias los primeros días, pero no dolor. Esto es señal de que algo no está colocado adecuadamente.
Por lo general, el bebé debe saber succionar correctamente desde el primer día, pero si no es así, tú le indicarás cómo hacerlo. Para que comprenda que no lo está haciendo bien, interrumpe toda aquella lactancia que no esté correcta y él irá aprendiendo y respondiendo.
...Porque lactar es 100% natural...
Adaptación por: Karla Toledo
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