jueves, 3 de octubre de 2013

Los ojos del bebé

 agendaparamamaDigital


Foto:www.crecerfeliz.es

                           

 Los ojos de la niña de tu ojos: La salud visual de tu pequeño 

 

¿Sabes qué quiere decir la expresión “niña del ojo”? 

Cuando se dice esto, literalmente se refiere a la pupila, que es por donde le entra la luz al ser humano, luz que en la retina se convierte en una señal neural, que en la corteza visual de nuestro cerebro se torna en la imagen que podemos reconocer.

La frase desde tiempos antiguos se utiliza para referirse a lo más querido, aquello por donde penetra la claridad al interior de una persona. 

Por ejemplo, la Biblia dice que para Dios el pueblo de Israel es “la niña de su ojo”. Así que si quieres que la niña de tus ojos tenga su día claro, debes atender su salud visual, desde su llegada al mundo. 

Según la Academia Estadounidense de Oftalmología y la Academia Estadounidense de Oftalmología Pediátrica (AAO y AAPOS, debido a sus siglas en inglés, respectivamente), los primeros análisis de la vista de un niño deben hacerse: 

• en el recién nacido. 
• a los seis meses. 

• a los tres años. 

• a los cinco años. 

Según estas entidades, la detección y el tratamiento temprano de muchas enfermedades, que ponen en peligro la vista, son imprescindibles para curar o disminuir la progresión de la pérdida de visión. 

Esta prevención de las patologías visuales infantiles debe realizarse a través de los exámenes de rutina del ojo para examinar la agudeza visual y, siempre, en caso de traumatismo.
 

Pendiente a… 
Tu hijo podría tener problemas visuales si… • se frota los ojos constantemente, • muestra extrema sensibilidad a la luz, • enfoca deficientemente, • sigue los objetos con dificultad, • el alineamiento o movimiento de sus ojos es anómalo (a partir de los seis meses de edad), • si el pequeño exhibe irritación y lagrimeos crónicos, • si tiene la pupila blanca en vez de negra, • muestra incapacidad para ver objetos distantes, para leer la pizarra en clase y para la lectura en general, • cruza los ojos, • se sienta demasiado cerca del televisor. Si detectas cualquier problema visual en tu pequeño, llévalo inmediatamente a un profesional de la salud especializado en la vista para que lo evalúe a fin de que el problema no se vuelva permanente. 

Si estos se identifican a tiempo, generalmente se pueden remediar.  Los niños de todas las edades, incluso los bebés, pueden utilizar anteojos y lentes de contacto. 

Si tú niño es uno de estos, te aconsejamos que: • Permitas que el niño escoja sus propias monturas o marcos. Si es menor de dos años, te recomendamos monturas plásticas. • Si un niño lleva una montura de metal, asegúrate de que dispone de bisagras flexibles, que hacen las gafas más duraderas. • En los niños más activos, ata las patas de los anteojos a un cordón elástico, que ayudará a evitar que se les caigan. • Las lentes de policarbonato son recomendables para todos los niños, sobre todo para quienes practican deporte. El policarbonato es un termoplástico transparente, duro y a prueba de golpes, que se utiliza para fabricar lentes finos y ligeros. 

No obstante, aunque son muy resistentes a los impactos, se rayan con más facilidad que los lentes de plástico. Los lactantes con cataratas congénitas pueden necesitar una intervención quirúrgica para extraerlas durante las primeras semanas de vida. 

Algunos bebés que nacen con cataratas deben llevar lentes de contacto tras la intervención. Cerca de los 10 años, algunos niños expresan su deseo de llevar lentes de contacto por su imagen o porque quieren practicar deportes. 

Permitir que tu hijo lleve lentes de contacto va a depender estrictamente de que sepa ponérselos y quitárselos correctamente, se los saque cuando sea necesario y se los limpie siguiendo las recomendaciones del médico. Los problemas con los lentes de contacto casi siempre están provocados por malos hábitos de uso o por falta de higiene.

El profesional de la vista le ayudará a tu niño decidir qué tipo de corrección visual es mejor para él. Así en todos habrá luz…

No hay comentarios:

Publicar un comentario