miércoles, 31 de julio de 2013

Promueve una autoestima positiva




RedacciónAgendaparaMamá





                            
Foto:www.msnlatino.telemundo.com



                              De 5 a 12



Los padres son quienes sentarán las bases de la autoestima de sus hijos. Comenzar desde el nacimiento a proveer el ambiente idóneo para su desarrollo, en gran medida, ayudará a que tu hijo despunte como una persona feliz y segura de sí.

La autoestima es la percepción y las expectativas que tiene sobre sí una persona. También, la forma en que las personas significativas en su vida piensan de esta y la perciben. Mientras más se acerque la percepción de una persona a lo que quisiera ser, mayor va a ser su estima propia.

El valor propio de una persona va surgiendo desde muy temprano, de la interacción entre sus cualidades innatas y las influencias de su medioambiente. A medida que un niño va creciendo, las respuestas que obtiene a sus necesidades y deseos reforzarán o herirán su confianza y seguridad. Visualizarse positivamente será de gran importancia para sus logros, relaciones sociales y equilibrio emocional a lo largo de su vida. También, les dará las herramientas para reconocer sus debilidades y, a pesar de ellas, sentirse capaz de alcanzar lo que se propone.

Para tener una buena autoestima
La autoestima se alimenta de los distintos sentimientos que se tienen hacia una variedad de aspectos existenciales. Para una autoestima saludable, es necesario tener un sentido de:
  • Seguridad: No lo invade la incertidumbre cuando piensa sobre su vida y su futuro.
  • Pertenencia: Se siente aceptado y querido por su familia primeramente, así como por el resto de las personas con quienes se relaciona en los distintos ámbitos.
  • Propósito: Tiene metas que le dan dirección. De lo contrario, podría sentirse aburrido y carente de sentido en la vida.
  • Orgullo: La confianza le ayuda a sentirse capaz de superar los retos y a reconocer que el esfuerzo que invierte rinde resultados.
  • Confianza: Necesita saber que cumples las promesas que le haces, que lo apoyas y que crees en él. Esto lo hará confiar en las personas.
  • Responsabilidad: La oportunidad de demostrar lo que es capaz de hacer sin la necesidad de ser vigilado constantemente demuestra que tienes fe en él.
  • Contribución: Saber que tiene algo que aportar y que él cuenta lo ayuda a valorarse y a comprometerse con actividades que lo trascienden.
  • Decisión: Siente que tiene influencia y control sobre los asuntos que considera importantes. Las decisiones que se le permita tomar deben ser acordes con su edad.
  • Autodisciplina y autocontrol: A medida que va adquiriendo independencia, necesita saber que es capaz de razonar, resolver problemas y considerar las consecuencias de sus acciones.
  • Incentivo, apoyo y recompensa: No solo es necesario que realice acciones, sino que reciba reconocimiento y respuestas positivas por ellas de parte tuya. Aunque no logre lo propuesto, premia su esfuerzo.
  • Aceptar los errores: Necesita sentirse cómodo y no derrotado cuando falla o comete errores. Enséñale que son un aspecto normal de la vida y anímalo a aprender de estos.
  • Autoestima familiar: La percepción que tiene la familia de sí misma afecta la autovaloración de sus individuos. La solidaridad entre sus miembros (la ayuda y el apoyo que se brindan) es de suma importancia.

Indicadores de que algo no está bien
Tu hijo puede mostrar indicios de una baja autoestima. Debes estar atenta a las siguientes señales en su conducta. Pueden ser respuestas cotidianas al mundo que lo rodea o surgir solo en ocasiones específicas, pero podrían representar un problema si se convierten en un patrón.
  • Tu hijo rechaza una tarea o un reto sin siquiera tratar.
  • Desiste de un juego tan pronto surge la primera señal de frustración.
  • Hace trampa o miente cuando cree que va a perder.
  • Muestra señales de regresión, tales como actuar de forma infantil o muy tonta.
  • Se vuelve controlador, autoritario o inflexible.
  • Inventa excusas o minimiza el valor de ciertos eventos para desviar la atención de sus fallos a otras causas (“El maestro es estúpido” o “No me gusta el baloncesto de todos modos”).
  • Ha perdido su interés por algunas actividades o sus notas de la escuela han empeorado.
  • Se retrae socialmente, por lo que pierde el contacto con sus amistades.
  • Cambia mucho de ánimo, va de la tristeza al enojo, al silencio.
  • Hace comentarios rigurosos de autocrítica.
  • No acepta fácilmente los elogios ni las críticas.
  • Se preocupa mucho sobre la opinión que tienen los demás sobre él.
  • La influencia negativa que tienen sus amistades sobre él es demasiado fuerte y adopta conductas indeseables.
  • Te ayuda en extremo en los quehaceres del hogar o no ayuda en lo absoluto.

Tú debes ayudarle
Es necesario consultar con su pediatra u otro profesional si sospechas que tu hijo tiene problemas con su autoestima. Si ambos llegan a la conclusión de que es así, deberás revisar los componentes que se describen en el recuadro y ver cómo se aplican a su entorno para saber qué cambios necesitas hacer. Toma la iniciativa con pasos positivos y reconoce que, dada tu influencia, puedes convertirte en una pieza clave para que tu hijo recupere su estima.

Algunas sugerencias son:
  • Pasa tiempo con tu retoño. Encuentra actividades que puedan hacer juntos y que le ayuden a sentirse exitoso a la vez que se divierte.
  • Trátale como una persona importante. Lo es. Anímale a que se exprese, sin emitir juicios; acepta sus sentimientos; y respétale.
  • Siempre que sea posible, permite que tome decisiones y asuma responsabilidades. Demuéstrale que confías en él o ella.
  • Crea lazos familiares cercanos y hazle sentir que contribuye a estos.
  • Anímale a que participe en actividades de servicio a los demás para fortalecer su sentido de comunidad, esto le ayudará a crecer como ser humano.
  • No le confíes ni lo involucres en las tensiones matrimoniales o en otros temas de adultos.
  • Enséñale a elogiarse. Debe sentir orgullo de sus logros.
  • Dile cuánto le amas. Aunque con las acciones a menudo se lo demuestras, también necesita escucharlo.

 La información de este artículo se tomó del libro Caring for Your School-Age Child: Ages 5 to 12, de la Academia Americana de Pediatría.

martes, 30 de julio de 2013

Pequeños inquisidores



Elizabeth Santiago Berríos

 

Foto: www.vidayestilo.terra.com


Preguntas: De 5 a 12

Si de algo puedes estar segura es que tu niño te hará preguntas que no sabrás cómo responder, y esto sucederá a menudo. No estás sola: un gran porcentaje de padres y de maestros no sabe las respuestas a muchísimas preguntas, incluso las relacionadas con eventos ordinarios como la lluvia. Es natural que las encuentres retadoras, pero trata de no evitarlas o ignorarlas ni proveer información falsa. Aquí contestamos de forma relativamente sencilla algunas preguntas comunes que formulan los niños.


¿Por qué el cielo es azul?
La luz solar que recibe la Tierra es luz blanca, que está formada por una gama de colores, al igual que el arco iris. Esos colores representan ondas de distintas longitudes y frecuencias. Cuando la luz entra en contacto con la atmósfera, choca con las partículas en el aire, y hacen que los colores se dispersen. Las ondas azules, que son más cortas, se esparcen más que las rojas, que son más largas y atraviesan la atmósfera de forma más directa. Las ondas azules chocan con las partículas, se esparcen en diferentes direcciones y siguen interactuando, hasta que llegan a nuestros ojos. Por eso es que nos parece que el cielo es azul.

¿Por qué me suena la barriga (las tripas)? 
Hay un tubo que recorre desde la boca hasta el ano, que forma parte, junto a otros órganos, del sistema digestivo. El sistema digestivo recibe la comida y la bebida que echas por la boca, extrae lo que necesita el cuerpo y desecha el resto. Las paredes de este sistema están cubiertas de músculos suaves, que se contraen para mezclar los alimentos con la bebida y los jugos digestivos, y así descomponerlos. También ayudan a mover la materia desde el principio hasta el final.

Cuando el sistema no ha tenido más nada que procesar durante aproximadamente dos horas, vuelve a hacer los mismos movimientos para asegurarse de que no queden pedacitos de materia ni mucosidad ni bacterias. También es una forma de señalarte que está listo para más comida.

¿Por qué yo mismo no me puedo hacer cosquillas?
Puedes hacerte cosquillas, pero no te vas a reír. El cerebelo, que se encuentra en la parte posterior del cerebro, controla nuestros movimientos y está tratando de anticipar el futuro todo el tiempo. También, le recuerda a tus músculos movimientos anteriores o rutinarios. Por ejemplo, cuando caminas, no estás pensando en que tienes que flexionar la rodilla, levantar el pie, impulsarte hacia el frente y pisar, para de forma seguida hacerlo con el otro pie. El cerebro ya ha memorizado este movimiento y sabe qué esperar de él. Lo hace para que puedas pensar en otras cosas y puedas anticipar peligros o situaciones espontáneas. Si acaso algo cambiara, como la superficie sobre la cual caminas o la intensidad del viento, el cerebro tratará rápidamente de adaptarse. Si no lo hace, es probable que te caigas. Sin embargo, la próxima vez que enfrentes esa situación, el cerebro sabrá corregir el error.

Cuando tratas de hacerte cosquillas, el cerebelo no tiene que anticipar ni imaginarse cómo será el estímulo: lo sabe porque lo estás originando tú. Lo sabe incluso antes de hacerte cosquillas: tan pronto lo piensas. Sabe exactamente con qué dedos vas a hacerte cosquillas, en qué parte del cuerpo y cuán intensas van a ser. No puedes engañarlo.

¿Por qué los adultos pueden tomar café y yo no?
El café es una bebida que gusta a muchas personas de todo el mundo. Una razón por la que gusta es el aroma y el sabor. Además, el café contiene un químico natural, llamado cafeína, que también se encuentra en el chocolate, el té y las sodas. Muchas personas sienten que, cuando consumen cafeína, estás más despiertas o alertas. Sin embargo, tomar demasiado café no es bueno. A los niños no se les da café porque pueden tener problemas para dormir; es importante que tomen otras bebidas más saludables, como la leche y el agua; y la cafeína causa la pérdida de la densidad de los huesos, que para nada ayuda a un niño que está en pleno crecimiento.




lunes, 29 de julio de 2013

"Es hora de estudiar"



Eira Y. Canales Cosme
eira@casiano.com


Foto: www.planetaellas.com


Enséñales como establecer metas, priorizar y mantenerse organizado en la escuela con las técnicas de estudio apropiadas.

 

  Lo primero que debe aprender un estudiante para ser exitoso en sus clases y año académico es trazar un plan para poder llevar a cabo la meta. Las metas pueden ser tan simples como hacer la tarea en menos tiempo o mejorar las calificaciones, pero todas, por más sencillas que parezcan demandan un conjunto de destrezas y hábitos para   alcanzarlas. A continuación mencionamos algunas técnicas.

Establece  prioridades
Con asistir a las prácticas de soccer, hacer tareas escritas para entregar, sacar tiempo para cenar en familia y ver  televisión la agenda diaria de cualquier niño está más que cargada y ocupada.  Con este panorama aprender a como priorizar asuntos es un reto hasta para los adultos. Para ayudar a adquirir estas destrezas se puede comenzar discutiendo las diversas actividades que tiene pendientes después de clases. Pregúntale al niño: ¿Cómo establece prioridades? Puedes pedirle que haga una lista de las  actividades que le falta por hacer después de clases y  que las acomode en orden de importancia. Permite que sea el  niño quien escoja sus propias prioridades, es lógico que  al  el   hacerlo todo algunas van a tener mejores consecuencias que otras, pero es parte de su aprendizaje.

Indica cuáles son  las reglas del  juego
Pregúntale al niño qué aprendió sobre fijarse metas, esta es la oportunidad de hablar sobre las prioridades diarias en el salón de clases y de ayudar a los estudiantes a hacer metas alcanzables para todas las clases. Una forma simple de explicar la diferencia entre  prioridades y metas es que las prioridades “son deberes que hacer” y las metas “son planes por hacer”.  Pídele que te ayude a  ser una lista de cuáles son las prioridades en el salón.  Por ejemplo: la seguridad y  el aprendizaje. Indícale que escriba metas alcanzables en corto término, luego en un término medio y posteriormente por espacio de un año.

Crea un buen ambiente de estudio
En un núcleo familiar muy concurrido, encontrar un lugar para leer y hacer las tareas  puede ser un verdadero reto. Un lugar tranquilo y organizado puede hacer una gran diferencia al momento de estudiar. Evita factores de distracción. Muchos estudiantes  tienen problemas para  concentrase porque no tienen un ambiente adecuado y están expuestos a muchísimas distracciones.

Haz un plan de estudio
Pídele al niño que cierre los ojos y se visualice a sí mismo estudiando de manera  efectiva. Conversen sobre cuáles serían buenos lugares para  estudiar y en qué momento del día es más apropiado.

La importancia de saber administrar 
Aprender a manejar bien el tiempo es una  herramienta  exitosa tanto  en la casa  como  en la  escuela.   Por tanto, es aconsejable  que  incorpores el uso del calendario y agenda para mantener a tu hijo organizado y con los trabajos al día en todas sus clases. Desarrollar esta destreza le ayudará para toda la vida.



MÁS  HERRAMIENTAS DE ESTUDIOS...


Metas personales
Haz que establezca  metas a corto, medio y largo término y las documente para que se motiven a  alcanzarlas.

Compartir lo aprendido
Pueden hacer folletos con consejitos sobre las técnicas de estudios que prefieren y colocarlos en  el tablón de edictos de la escuela para que otros compañeros se beneficien y motiven a compartir las técnicas que le resultan más efectivas.

Listado de cosas por hacer
El hacer una lista de las actividades y tareas después de clases ayuda a  que  los niños estén concientes del tiempo que invierten en cada actividad  y sean más concienzudos en la manera de dividirlo.





*Fuente: Información  provista por Scholastic.

viernes, 19 de julio de 2013

Bizcochos de cumpleaños



Por: Eira Y. Canales Cosme
Fotos: Ana LLuch
Estilismo:Cristina Camayd Romero

 
Foto> www.freepik.es

 

¡HAPPY B-DAY TO YOU!



¿En busca de una tarta de cumpleaños que despierte curiosidad, entusiasmo y sea una verdadera obra de arte?  Te presentamos opciones de diseños propuestos por los arquitectos del azúcar para ayudarte a elegir el bizcocho perfecto para el cumpleaños de tu pequeño. ¡Échales un vistazo! 

Sin duda, uno de los elementos más importantes de la fiesta es el bizcocho. El mismo debe ir acorde con el motivo de cumpleaños que elijan ya que complementa la  ambientación de la fiesta. Existe un sinnúmero de ideas que no necesariamente deben estar sujetas a un motivo de un dibujo animado comercial o de moda en el momento.

Dejen correr su imaginación con temas tan diversos como: Candyland, Fairy Tale, Alien Invasion, motivos circenses, exploradores de insectos, autos de carrera o una fiesta tropical o Hawaiana, ya que suelen gustar muchos a los niños.  Eso sí, toma en cuenta que el tema que elijas, va estar bien presente en la toda la decoración del lugar donde lleves a cabo el agasajo. Por lo tanto, considera el diseño, los colores y cuan accesible puede ser conseguir los elementos decorativos para crear un entorno de ensueño. La idea es crear  un mundo imaginario que este en armonía con el concepto y la fantasía que quieras proyectar.

 CONSEJOS

-La cantidad de personas que invites puede determinar el número de pisos que tendrá el pastel de cumpleaños.

¡Haz tu cálculo!

 50 personas = 2 pisos
 75 personas = 3 pisos
100 personas = 4 pisos
150 personas = 5 pisos
175 personas = 6 pisos

 Considera lo siguiente:

-Cuando seleccionas el bizcocho debes considerar la formalidad y la ambientación de la fiesta. El diseño del pastel que elijas debe armonizar con el resto de la decoración.

-Se recomienda que el bizcocho se monte dos horas antes que inicie la actividad. En eventos al aire libre, es preferible una hora antes, porque la humedad hace que el bizcocho coja mucho brillo, esto no afecta el sabor, pero, sí la estética del pastel de cumpleaños.

-Los sabores más solicitados son los de vanilla y chocolate. No obstante, puedes hacer algo distinto añadiendo empaste o relleno de mermelada de frambuesa, crema de chocolate o crema de coco, entre otros ricos sabores.